Monday, September 18, 2006


NACIONALISMO REVOLUCIONARIO
PUERTORRIQUENO (1956-2005):
La lucha armada, los intelectuales y nuestros prisioneros politicos y de guerra

Editorial Isla Negra, San Juan,PR

Introduccion

La campaña por la libertad de los prisioneros políticos y de guerra, la defensa del Valle de Lajas, las protestas contra la privatización de la Telefónica de Puerto Rico y el movimiento para sacar la Marina de Guerra de Vieques en la década del noventa tuvieron como hilo conductor un discurso y una práctica nacionalista revolucionaria. En el testimonio que Juan Mari Brás ofrece al profesor Daniel Nina en 1998, el líder independentista establece que el nacionalismo revolucionario puertorriqueño se forja en la nueva lucha, vinculado a las corrientes anticoloniales, internacionalistas y latinoamericanistas de mediados del siglo XX. Es en este contexto que los nuevos movimientos sociales, tales como la Federación Universitaria Pro Independencia (FUPI) en 1956, el Movimiento Pro Independencia (MPI) en 1959 entre otras organizaciones, rearman el movimiento de liberación nacional dotándolo de una interpretación materialista de la historia, incorporando la lucha de clases y el derecho irrenunciable a la autodeterminación.
El nacionalismo revolucionario puertorriqueño tiene sus orígenes en la Revolución de 1868. Se radicalizará en la gesta por la descolonización del Partido Nacionalista (1933-1954) y encontrará su máximo exponente en Filiberto Ojeda Ríos, Responsable General del Ejército Popular Boricua-Macheteros (EPB-M). En su ensayo sobre la lucha armada publicado por el semanario Claridad el líder clandestino sostuvo que los macheteros son nacionalistas revolucionarios, que su lucha está entronizada en el territorio nacional y en la identidad puertorriqueña y su espíritu revolucionario determina que esa lucha sea por la justicia e igualdad social. Este trabajo nos permite examinar en qué contexto se desarrolla el pensamiento político-militar de Filiberto Ojeda Ríos.
El nacionalismo revolucionario se ha manifestado en tres dimensiones del quehacer histórico en Puerto Rico: por medio de la resistencia cultural de la elite intelectual y de las organizaciones populares y a través de la lucha armada. Esta última manifestación no se ha estudiado cabalmente, aunque ciertamente ha sido el eje de debates y controversias ideológicas en la prensa y en la academia. Por eso este trabajo gira en torno a las contribuciones de la lucha armada, de los prisioneros políticos y de los intelectuales al movimiento de liberación nacional puertorriqueño.
Este trabajo sobre el nacionalismo revolucionario puertorriqueño destaca la actuación de las Fuerzas Armadas de Liberación Nacional (FALN) y el Ejército Popular Boricua Macheteros (EPB-M). Ambas organizaciones emergen dentro del contexto del nacionalismo revolucionario como fuerza política popular, retando los esquemas dogmáticos del socialismo partidista así como los del nacionalismo conservador. Como lo ha propuesto la antropóloga Ana Ramos Zayas, particularmente en el contexto de Chicago, el nacionalismo puertorriqueño no es solamente una ideología o proyecto intelectual sino un medio concreto que sirve para forjar alianzas de clase en múltiples niveles políticos y sociales. De acuerdo con esto, el lector observará cómo la lucha armada puertorriqueña fortaleció los movimientos sociales en la Isla y dentro de la comunidad boricua en los EEUU.
En estos ensayos propongo, luego de manejar diversos acercamientos metodológicos tales como la investigación historiografía, la entrevista y el análisis de contenido, que la lucha armada, los prisioneros políticos y los intelectuales han contribuido a la transformación de nuestra nacionalidad. Gracias a una beca de la Sociedad para el Estudio de los Problemas Sociales (SSSP) pude recopilar y examinar una gama de documentos históricos publicados por las organizaciones nacionalistas revolucionarias entre 1955 y 2005. Esta investigación preliminar armó parte del rompecabezas pero además me provocó a entrevistar a algunos de los militantes de estas organizaciones, en especial a los/as prisioneros políticos y de guerra liberados a partir de 1999. Para completar mi análisis estudié el contenido de una serie de obras intelectuales que van desde la creación literaria hasta la crítica sociológica y en las cuales se representa el nacionalismo revolucionario desde sus respectivas formas y discursos.
En el primer capítulo examino las causas, el origen y las organizaciones del nacionalismo revolucionario puertorriqueño. En el segundo capítulo propongo, gracias a las entrevistas y al análisis de contenido de las vidas de los prisioneros políticos y de guerra, que éstos formaron parte de un bloque de intelectuales orgánicos que a través del trabajo comunitario y la organización popular se integraron por completo a las luchas populares. Para concluir, en el tercer capítulo analizo cómo las representaciones culturales de otros intelectuales forman parte de la construcción del nacionalismo revolucionario como fuerza de cambio y transformación social.
Espero que este texto pueda guiar a otros científicos, literatos y estudiosos en general por el complejo entramado del nacionalismo revolucionario. Esta obra, claro está, no agota las posibilidades de estudio del tema; más bien ofrece un mapa que nos permite comprender una de las dimensiones del proceso de autodeterminación y descolonización de Puerto Rico.

Dr. Michael Gonzalez Cruz

La imagen que acompana esta introduccion de la obra Nacionalismo Revolucionario Puertorriqueno (1956-2005) es una composion de Febea en ella pueden apreciar las pinruras de los prisioneros de guerra Luis Rosa (Betances), el maestro Elizam Escobar (Sudario de Filiberto) y el Albizu de Oscar Lopez actualmente encarcelado por mas de 25 anos.